on 2011/4/4 1:40:00 (989 reads)

De todos los errores que haya tenido el gobierno en materia de política exterior, los más graves han sido su identificación con regímenes como los de Mugabe, Cuba e Irán, por su permanente violación a los Derechos Humanos y en el caso de Libia además, por poner en peligro la paz mundial y la soberanía de Venezuela. Es de recordar que las decisiones del Consejo Permanente, son de obligatorio cumplimento para todos su miembro.

Uno de los postulados comunes tanto del gobierno como de los sectores democráticos que le adversan, viejas instituciones; sin embargo, de ese pasado hay que rescatar como institución, lo que fue la Cancillería, su política exterior y su servicio diplomático.

El periodo democrático entre 1958 y 1999, se puede calificar como el de la institucionalización y consolidación de la política exterior venezolana en el más amplio sentido de la palabra. Aquella democracia hoy tan vilipendiada y con tan pocos defensores, hay que recordar, institucionalizó la diplomacia venezolana; le dio al país en 1961 una Ley Orgánica del Servicio Exterior.

El actual proyecto de Ley aprobado en segunda discusión, convierte a la carrera diplomática, en un aparato propagandístico del gobierno y un servicio pretoriano a la orden exclusiva del Presidente de la República. Si no, cual es el la razón de haber acabado con los exámenes concurso para el ingreso a la Carrera y reservarse la designación total de los embajadores, sin dejar espacio para los profesionales de carrera.

Las nuevas generaciones hoy en el Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores, deben saber que la anterior Cancillería contaba con instituciones como la Academia Diplomática Pedro Gual, fundada por ese gran negociador que fue el Canciller Isidro Morales Paul; la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores (CARE) y un Consejo de Asesoría Jurídica, los cuales además de darle institucionalidad al Ministerio de Relaciones Exteriores, lo hacían competitivo con otras cancillerías como Itamarati, San Carlos y Tlatelolco, en el manejo de la agenda internacional.

El último Canciller de la Democracia Dr. Miguel Angel Burelli Rivas, entregó una Cancillería con 11 venezolanos en las más altas posiciones de organismos internacionales entre ellos la CAN, ALADI, CLAD, CAF, AEC, CIDI, CJI.

Por estas y otras razones, sí creo que hay que ver hacia atrás en lo que fue nuestra política exterior, pero no para reconstruirla sobre lo que queda de ella; sino para refundarla de acuerdo a los nuevos tiempos y retos que impone la globalización.

Contacto:grevanales@aipop.org / www.aipop.com.ve J Gerson Revanales, Embajador de Carrera