on 2010/11/28 23:14:10 (765 reads)

Nuestro Editorial del

Boletín N° 19, trató sobre lo injusto de las medidas de «expropiación» aplicadas por el Gobierno Nacional, quien utiliza el IPC en sus contrataciones, pero sataniza y prohíbe su uso por parte de los constructores de viviendas privados. A lo ahí expresado podemos agregar las siguientes observaciones: A.- Situación de los compradores: Es totalmente cierto que se trata de una situación inédita y complicada, en la cual el comprador se encuentra ante dos realidades innegables: Mientras el precio ofrecido inicialmente, sube, en una manera bastante elevada por el IPC, el inmueble adquirido también incrementa apreciablemente su valor durante el tiempo transcurrido (incluso, mucho más que el IPC). Esto nos permitiría decir que el comprador está realizando un extraordinario negocio, pues recibiría un apartamento cuyo valor está muy por encima de lo que él ha pagado, aún con el aumento del IPC incluido. Pero esta situación se ve afectada por dos tristes realidades:

1.

Cuando el comprador suscribe el compromiso de compra, su intención no es la de realizar una Especulación Inmobiliaria. El lo que pretende es comprar una vivienda para él y su familia y satisfacer sus justas aspiraciones después de años de trabajo. De nada le serviría obtener una ganancia económica. El lo que quiere es una vivienda, ¡su vivienda! Para él y su familia.
2.

Por otro lado, Lo más probable es que ese comprador, ante una elevada inflación, no disponga de los recursos necesarios para realizar esa operación; viendo así alejarse su objetivo de obtener una vivienda.
B.-

Sin embargo, como decíamos en el

Situación de los Constructores y Promotores: Los Constructores y Promotores se encuentran a su vez en una situación sumamente difícil. Han adquirido un compromiso con una cláusula para prever la inflación, y repentinamente el Gobierno le cambia abruptamente las reglas inicialmente acordadas por él y los compradores. Además, las demoras en la permisología, la falta de insumos en el mercado, la demora en los registros y una de las inflaciones más altas del mundo, se combinan en una suerte de sinergia, que dificulta y retrasa al máximo la terminación y entrega de los inmuebles. QUIEN ES EL VERDADERO CAUSANTE DE ESTA SITUACIÓN: Es evidente que el gobierno al tomar esta medida sin hacer un previo estudio, ha originado una situación caótica mucho peor que la que buscaba corregir. Boletin N° 19, el Gobierno utiliza y aplica directa o indirectamente el IPC constantemente en todas sus actividades, a saber:
1.

En sus contrataciones con los privados bajo las formas de reconsideración de precios, clausulas escalatorias o contratando en monedas extranjeras,
2.

Con el aumento de la Unidad Tributaria,
3. Con la devaluación de la moneda,

4.

Con el aumento de los precios, aun en los productos controlados y principalmente,
5. Con la desmesurada inflación.

Igualmente ha sido el mismo gobierno el causante de:

1. La demora en la Permisología.

2.

La escasez en los insumos, al expropiar las industrias que los producían.
3.

Demora en los registros.
4. Falta de dotación de los servicios básicos en muchos casos.

Se exhorta a las autoridades, a estudiar cada caso en particular y aplicar las justas medidas, incluyendo los castigos que sean necesarios. En próxima entrega trataremos las consecuencias de esta situación.

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